domingo, 13 de diciembre de 2009

Conversaciones con un fantasma

- ¿Quién dijo que podías seguirme, charlando con mi sombra? Te dije que te olvidaría, y lo hice. ¿Por qué me sigues?
- Yo no te sigo, no. Vos me llamas a cada paso, y acá estoy. ¿Por qué me llamas? Sabes que no soy bueno a tu corazón. Sabes que tengo el don de mezclarlo todo.
- No te llame. No. A quien llamo es al amor, y ese no sos vos. Quedó bien en claro la octogésima vez que desapareciste. Si, me llevo 80 desengaños, pero finalmente me desengañe.
- Llamas al amor, y sin embargo quien esta acá, soy yo. ¿Qué hago acá si no es por vos? Solo vengo a tu llamado.
- Jajaja. Si hay algo que nunca hiciste fue acudir a mis llamados. Ahora que no te necesito te dignas a aparecer? Entenderte nunca fue mi fuerte.
- ¿Ya no me necesitas?
- No. Estoy bien sin vos, mucho mejor. Odio tu voz, eso es lo que me persigue. Tu voz. Así que por qué no cerrás la boca de una vez? Tus palabras son puros silencios. No dicen nada. Solo me recuerdan vacíos. Así que basta, por favor basta.
- No podes silenciarme! ¿No lo entendés? Vos y yo somos uno. Hace tiempo mi voz es tu voz. Hace tiempo me atormentas entre sueños. Somos uno, yo en vos y vos en mi.
- No! No te creo. No sigas por favor. Yo puedo ser feliz. Tu voz se callará, y nuevas voces aparecerán. Y seré feliz, seré amada. Vos nunca me llenaste, nunca fuimos uno. ¿Por qué habríamos de serlo ahora?
- De verdad no lo entendés, eh? Nunca fue una elección. Yo no te elegí y vos no me elegiste. Nos eligieron los astros, con la única finalidad de atormentar nuestras vidas por siempre. No hay culpas en todo esto.
- Ya no te elijo, y esa si es mi elección. Vos nunca me elegiste, nunca creíste en los astros. Basta! Basta! No me persigas mas. Lo elijo a él. Hoy que puedo, elijo a Gabriel. Elijo al amor.
- Gabriel no existe. Es una ilusión. No tiene cabellos al viento, ni te lleva atada a su cintura. Yo soy bien real. Un fantasma bien real. Acá estoy.
- Ves que no entendés nada! Así sea una ilusión, es mucho mejor que cualquier realidad que puedas ofrecerme. Pero seamos sinceros. ¿Cuando me ofreciste mas que castillos de cristal? ¿Cuando dijiste hoy es el día de empezar a construirlo? Con vos nunca hay hoy. Tenemos miles de pasados, y algún que otro futuro, pero nunca tenemos un hoy.
- Hoy estoy acá, hablando a tus oídos. Siempre es hoy en mis sentimient...
- Basta! Te lo suplico. Ya tuviste oportunidad de decir, y no la quisiste. ¿Te acordás? Fue aquel día que destrozaste mi corazón por ultima vez. Fue aquel día que finalmente pude ver.
- Las horas bajarán. Yo se que bajarán.
- No, el amor no es real. Y no hay nada en la forma en que me muevo.
- Y sin embargo, sigo aquí.
- Yo no, ya no esperaré a que suba la marea.
- Y el patio con hojas en aquel invierno?
- Es que nada es eterno, y ya tuvimos la fiesta igual.
- De sobra sabes que eres la primera.
- Vas a volver a herirme otra vez?
- Si. Soy un fantasma. Tu me llamas en las noches, y yo vengo para amarte de la única forma que se... dañandote.
- Eso no es amor. No sé que es, pero no es amor. Amar es dar lo que no se tiene, y vos tenes demasiado con vos mismo.
- Y por qué me llamas entonces? ¿Es que acaso no te di nada?
- No... no me diste nada. Yo me di lo que pude con pedacitos de ti.
- Si me voy, estarás sola. Por eso me llamas. A pesar de ser un fantasma, aquí estoy cada día, siguiendo tus pasos, hablando a tu oído. Me necesitas tanto, como yo a ti. Tu me haces existir.
- Vuelve a tu cuerpo, allí serás bien recibido!
- ¿Es que no lo ves? Yo soy quien te ama, y él ganó la batalla.
- No me importa. Ya no sirve de nada. Nunca serás cuerpo, nunca serás nada. Solo me recuerdas lo que él no pudo dar. Solo me recuerdas el cuerpo que alguna vez habitaste. No me alcanza contigo. Puedo sola. Ya no necesito tu presencia a mi lado.
- Y que haré yo? A ese cuerpo no puedo volver. Mi razón de existir eres tú. Tu me llamas, y yo existo. No tengo otra forma de ser. Ya no. Lo siento. De verdad lamento no haber ganado la batalla...
- No, no me hagas esto. No puedo apenarme de ti. No luchaste lo suficiente. Quizás ese fue siempre el destino.
- Me desvanezco. ¿Estás segura que esto quieres?
- No, nunca quise esto. Pero lo necesito... Adiós...
- Polvo de estrellas... Nunca lo olvides cariño, nuestros astros son nuestros. Resplandor..., eterno resplandor. Tu lo sabes...
- Si, lo sé...



jueves, 3 de diciembre de 2009

Electricidad

El encanto de tu boca me llama desde lo lejos.
Me miras, te miro.
Me sonríes, te sonrío.
Y algo ocurre conmigo,
El cuerpo escapa a mis sentidos.

Me llamas, me llamas con la mirada.
Me llamas con cada respiro.
Tranquilo, sereno.
Sin prisas ni cuentos, me esperas allí.

Mi boca me suplica
que fluya con sus ganas.
Que flote hacia ti
como hipnotizada.

El ritmo me lleva,
mi corazón se acelera.
Y con todo mi cuerpo
presiento tus besos.

Me acerco, involuntariamente me muevo.
Atmósfera de sueños que danzan entre nuestros cuerpos.
Tus ojos me invitan a seguirte el juego.
A dejar rodar los dados de nuevo.

Me miras, te miro...
Me sonríes, te sonrío...

martes, 10 de noviembre de 2009

Me equivoque, esta es la puñalada final.

[Continuación de "La puñalada final"]

Todo vuelve a las llaves. Aquellas que llevo clavadas en la piel hace mas de 15 meses.
De repente hay algo que hierve. Me quema, cada célula de piel, cada pensamiento.
Polvo, puro polvo. En eso me convierto.
Las lágrimas solían empañarlo todo. Se secan con el fuego, y dolorosamente puedo ver. Me arde la mirada, se prende fuego inmóvil.
Ya no ríen desde la mesa, no. Ríen desde aquella cerradura que tantas veces se abrió, en mis noches de vacío. Ríen de las canciones, ríen de los versos. Se burlan de tantas cenas, de los llamados, de los bailes, de cada palabra. Se ríen a carcajadas de cada mirada que creí.
Ni siquiera triunfantes. No, es otra cosa. Es humillante. Se ríen de mi caída.
Se ríen de lo que solía pensar. No, no fue real. No para el tigre, no para mi. Fue el delirio mas intenso. Quizás uno no debería despertar en esos casos... Pero lo hice. Y al menos, ahora soy libre. Dolorosamente libre, si. Pero libre.
No volvería a entrar. Eso me sirve de consuelo. No habrá eterno retorno. Aunque siempre llevare esa marca, la de las malditas llaves que me queman la piel, que se hunden profundo en mi pecho. Llevare los rasguños, llevare tu voz grabada en mi piel. Todo quedará. Será mi castigo.
No es justo. Definitivamente no. Me robaste, robaste mi voluntad. No me dejaste elegir, y eso es imperdonable.
Robaste mis ideas, todo te lo llevaste: mis ganas, deseos, proyectos y tiempos. Nada, no queda nada. Ni soles, ni inviernos, ni alcoba, ni discos. No puedo guardar nada... Todo se ha contaminado, todo se corrompió. Las fotos se vuelven grises, los lugares se quiebran en pedazos, los versos me dejan un gusto agrio.
Serás mi bolilla negra, siempre. Una ruleta rusa interminable. Tatuaje azul en la voz azul. Historia escrita en melodías insoportables. Mi por siempre quizás. Un eterno "Y sin embargo", el final del arcoiris...


No tengo sueño... no tengo nada.
Un borromeo atravesado en la garganta.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Black

Sheets of empty canvas, untouched sheets of clay
Her legs spread out before me, as her body once did
All five horizons revolved around her soul
As the earth to the sun
Now the air I tasted and breathed has taken a turn
Ooh, and all I taught her was everything
Ooh, I know she gave me all that she wore
And now my bitter hands chafe beneath the clouds
Of what was everything?
Oh, the pictures have all been washed in black, tattooed everything...

I take a walk outside
I'm surrounded by some kids at play
I can feel their laughter, so why do I sear
Oh, and twisted thoughts that spin round my head
I'm spinning, oh, I'm spinning
How quick the sun can, drop away
And now my bitter hands cradle broken glass
Of what was everything?
All the pictures have all been washed in black, tattooed everything...
All the love gone bad turned my world to black
Tattooed all I see, all that I am, all I'll ever be...yeah...

I know someday you'll have a beautiful life,
I know you'll be a star
In somebody else's sky, but why
Why, why can't it be, why can't it be mine?

Oh oh...
We, we, we, we belong together, together...


Pearl Jam

lunes, 2 de noviembre de 2009

Mi ventana














Alargo un brazo.
Allí me siento.
Piel suave, tibia,
de aire y sueños.
Las yemas de mis dedos electrifican todo.
Me transporto, desaparezco.
Y del otro lado me siento.
Otro cuerpo, misma voz.
Chispas de una mano se desparraman por mi cuerpo.
No lo entiendo.
Con mis ojos me veo.
Y algo me estoy diciendo.
Me transparento...
Y me sigo viendo,
con mirada extraña.
No me entiendo,
allí donde me veo no me entiendo.
No entiendo mi reflejo.
No se que me deseo.
No se que me quiero.
Algo me estoy diciendo,
en mis pupilas verdes me veo...
En ambos lados me pienso.
Me recuerdo.
Sombra de mis versos,
fantasma de otro invierno...

martes, 27 de octubre de 2009

El niño de los ojos pardos

Se sento una vez mas a mirar por la ventana que tanto habia mirado. No sabia muy bien que esperaba ver, solo necesitaba creer que alguien iba a llegar, alguien que pudiera llenar el agujero en su vientre.
Necesitaba algun viento que la llevara muy lejos, algun viento del norte, que la salvara de si misma.
Sumida en las copas de los arboles, los veía mecerse, anticipando una tormenta primaveral.
Los veía contonearse allá arriba, bien alto. Y casi los envidiaba.
De repente se encontro derramando una lagrima. Sutil, casi imperceptible. Una lagrima de resignacion.
La dejó caer, con la expresion inmutable. Los ojos perdidos en las hojas verdes que se batian en el aire.
Por un momento se vio a si misma volando allá arriba. No fue una linda sensacion, no. Fue la horrible dialectica de la falta-deseo-certeza de falta.
Otra lagrima broto en ese instante. Sabia muy bien lo que le faltaba.
Las horas nunca bajaron. El día nunca se sento a morir. Y fue quedando atrapada en esa rara melodia, que retorcia su corazón con tan solo 6 primeros arpegios.
En su mente se tarareaba de vez en cuando, de forma involuntaria, pero con todo el peso de otros tiempos.
Llevo su mano al corazón, casi como acto reflejo ante ese primer Mi.
En ese momento un niño paso caminando de la mano con su madre. Le sonrió como quien ve más allá de la imagen, una sonrisa suave, leve. Apenas torcio el gesto a sus costados, y la miró con esa expresion tan particular que tiene quien comprende. Ni siquiera fue una sonrisa de resignacion, sino mas bien de quien ya entendio algo escencial. Una sonrisa de monalisa.
Probablemente el niño lo olvidaría en unos años, pero ella no. Hay expresiones que uno lleva consigo siempre. Porque realmente dicen demasiado para olvidarlas. Son casi enseñanzas de vida.
Nunca olvidaría sus ojitos color pardo, su cabello castaño despeinado. Por un momento hasta deseo ir a hablarle, decirle algo importante, algo que le sirviera; quizas hasta mantener contacto. Pero no, sabía que una palabra lo arruinaría todo. Que hay momentos que son perfectos tal cual son, que son todo lo relevantes que pueden ser, y por sobre todas las cosas, que dejan algo nuevo, siendo mejor no aclarar qué.
Se sonrió..., y perdió su mirada siguiendo aquellos pequeños pacitos, de un niño que le habia hecho el mejor regalo en ese día. Le regaló un poco de paz...

martes, 13 de octubre de 2009

Colores en el viento


Un vuelco...
A la izquierda, otro.
Danzamos con el viento, danzamos con el tiempo.
Giramos sin sentido; sin brújula ni destino.
Collage de sensaciones, mamarracho de colores.
Me mareo, freno... y vuelvo a empezar.
Celeste cielo, verde fresco, gris de ciudad...
Con los ojos al infinito, sin ver nada, y todo al mas allá.
Marcho a la deriva, girando y girando.
Jugando a no caer, y aún así me caigo.
Me levanto.
Vueltas y mas vueltas, me prendo de tu mano.
Me sostengo en tu contacto... tan frío, tan cálido.
Por momentos me elevo,
ya sin gravedad.
Revoloteo, me revuelco, me retuerso.


Cómo barrilete en el cielo,
pendo de un hilo en tu mano.
No me sueltes, no me enredes.
Solo quédate a mi lado...

sábado, 26 de septiembre de 2009

( )















Nada... simplemente nada.
Ni un viento, ni las horas, ni un libro, ni el desierto.
Nada, ni tu, ni yo, ni nadie.
Nada en la tierra, nada en el cielo.
Ni tu boca, ni tu alcoba, ni un cabello, ni una copa.

Nada, no hay piso, no hay techo.
Ni aleph, ni sentido, ni hades, ni olimpo.
Nada en mis ojos, nada en la piel.
Ni sabores, ni ruidos, ni olores, ni vacio.

Nada.
Ya no hay historias, ya no hay olvidos.
Ni recuerdos, ni nostalgias, ni lagrimas, ni descuidos.
Nada, sin caidas, sin amores, sin viajes, sin sonidos.
Sin calor, ni sueño, ni hambre, ni tiempo.
Nada, ni tu verde, ni tu vientre.
Ni un respiro, ni palabras.
Sin excusas, sin motivos.

Nada... ni universo, ni esperanza.
Ni luz, ni venganza.
No hay pasto, no hay pradera.
No hay agua, ni montaña.

Nada, ni ropa, ni casa,
ni espejos, ni manchas.
Ni teorías, ni sustancias,
ni dilemas, ni distancias.

Nada, ni siquiera pesimismo.
Ni siquiera algun abismo.
Ni inconciente, ni cariños.
Ni una voz, ni antagonismos.

Nada, ni cucharas de te,
ni cuchillos de hierro.
Ni muros, ni inviernos.
Ni la lluvia, ni tu cuerpo.

Nada, no hay palomas, ni ascensores.
No hay sombras, ni lamentos.
Ni poemas, ni ventanas.
Ni justicia, ni temores.
No hay canciones, ni pulsiones.
ni karma, ni cuentos.


Nada...

Sólo tu mirada.




[Locura de un dia raro, inspiración de no se donde]

sábado, 12 de septiembre de 2009

Soliamos...















Solía mirarte hasta quedarme dormida,
solía pensar que con eso alcanzaría.

Solías llamarme en madrugadas lejanas,
Solías besar mi voz en la distancia.

Solía escuchar tus versos en la ventana,
Solía despertar con tus manos mundanas.

Solías volver cada semana a mi piel,
Solías cantar cada mañana de miel.

Solía esperar entre risas tus platos,
Solía observar cada uno de tus rasgos.

Solías sacarme a bailar en la cocina,
solías pensar en mi cada rato de cada día.

Solía morir por un segundo en tus labios,
solía soñar que me hundía en tus brazos.

Solías mirarme con un brillo en los ojos,
solías dedicarme todos tus esbozos.

Solía caminar deprisa a tu puerta,
solía amar ese instante de espera.

Solías comerte las uñas del temor,
solías deberme una canción de amor.

Solía darte todo mi amor,
solía escuchar todo el día aquella canción.

Solías decir que llegaría el día,
solías amarme entre pesadillas.

Solía creer que todo cambiaría,
solía pensar que las horas bajarían.


Suelo soñar que vuelvo a tu cuarto,
Suelo escuchar aquella vieja canción.

Sueles gritar mi nombre entre sueños,
sueles escribir con desesperación.

Suelo llorar el recuerdo de tu alcoba,
suelo sentir en mi oído tu respiración.

Sueles tener segundos de claridad,
sueles creer que el tiempo no pasara.

Suelo bailar cada noche contigo,
suelo despertar en el invierno frío...

Te doy una cancion

Como gasto papeles recordándote
como me haces hablar en el silencio
como no te me quitas de las ganas
aunque nadie me ve nunca contigo
y como pasa el tiempo que de pronto son años
sin pasar tú por mi, detenida...

Te doy una canción
si abro una puerta
y de las sombras sales tú,
te doy una canción de madrugada
cuando mas quiero tu luz,
te doy una canción
cuando apareces
el misterio del amor
y si no no apareces
no me importa
yo te doy una canción.

Si miro un poco afuera me detengo
la ciudad se derrumba
y yo cantando
la gente que me odia y que me quiere
no me va ha perdonar
que me distraiga,
creen que lo digo todo
que me juego la vida
porque no te conocen
ni te sienten.

Te doy una canción y hago un discurso
sobre mi derecho ha hablar,
te doy una canción
con mis dos manos
con las mismas de matar,
te doy una canción
y digo patria
y sigo hablando para ti,
te doy una canción
como un disparo
como un libro
una palabra
una guerrilla...
como doy el amor.

Silvio Rodriguez

lunes, 3 de agosto de 2009

Solo voces
















La dulce espera de saber de ti, tiene de dulce lo que un café. Solo ansiedad, solo voces, solo eso escucho. Helen discute con Malena, acaloradamente se debaten. To wright or not to wright, that's the question...
Solo voces, solo eso. Gritan de todos lados, me apabullan, me abruman. Solo voces, solo eso tengo. Solo voces, y el recuerdo de tu olor a menta fresca, a color blanco, o azul, quien sabe. Olor a mar profundo, a celeste cielo. Tus colores son nuevos en mi boca, pintan sonrisas por doquier.
Te recuerdo de algún sueño, de mis años dorados, de ingenuos tropiezos, del aire, del viento. Te recuerdo de sueños livianos, felices, radiantes.
No quiero pensar, no, no debo. Solo fluir con el tiempo, solo fundirme en tus ojos de cielo.
Late, de a ratos late fuerte, se arrebata, salta, desespera, grita! No se bien que grita, no lo entiendo... No habla claro. Quizás solo salta para recordarme que esta allí, que no me abandono. Aún así no lo entiendo. No se que dice, no se que quiere. Solo grita algo, de nuevo voces, solo eso.
Me llaman en las noches, soplan a mi oído. Solo voces, ya no mías. Me cuentan historias, unas veces lindas, otras de pesadilla. Me hablan de amores, de viajes, casas y desiertos. Me cuentan del tiempo, de muertes y deseos. Me dicen que tus ojos serán siempre para mi los mas bellos. Y que tu boca, mi delirio mas perfecto.
Solo voces, solo ecos. Como sombras se escabullen en mis sueños, como espectros se cuelan en mis pensamientos. Me preguntan por sus versos, quieren saber que fue de ellos. Preguntan por los aires nuevos, me enredan en tus cabellos; me preguntan que deseo.
Y así me llevan a la comisura de tus labios, a las lineas de tu piel, a un romance de verano, o quien sabe, tal vez, a un otoño en la vejez.
Solo voces, como cantos del recuerdo, como soles de niñez. Voces dulces y no tanto, de esperanzas y lamentos. De nostalgias y alegrías. Solo voces, solo ecos, solo un nombre entre jadeos.
Escúchalo... escúchalo...

martes, 30 de junio de 2009

Me cuelgo...

Me aislo en tus notas, me encierro en tu mente.
Te sueño de golpe, atravesada entre dientes
Me escapo a tu boca, huyo desesperadamente
Ando tus pasos un rato,
caigo al augujero en tu vientre.

Ensordesco, ya no siento,
me envuelvo en tu sombra y vuelo.
Vuelo a otros aires, a campos de invierno,
de soles bien soles, azules bien lejos.

Giro en mi andar, voy a nunca jamas.
Me prendo a mi alma, tambaleo en sus alas.
El vertigo me llama, saltar y caer...
saltar y volar... el tiempo nunca vuelve a empezar.

Ya no me quemo, ya no deseo.
Solo respiro y te miro...
Sonrisa complice del duelo,
Sonrisa dulce de otros tiempos.

jueves, 25 de junio de 2009

Nessie


Hoy por algun motivo me puse a pensar en aquellos personajes ficticios que son particularmente grises. No en todas las ficciones es igual, algunas historias solo tienen al bueno y al malo, al heroe y al antiheroe, al hombre y al mounstruo. Pero en la realidad es un poquito mas complicado que eso. Y hay personajes como Chuk Bass, o Blair, y tantos otros, que no los podemos odiar realmente. Cuando comenzamos a no quererlos demasiado, los escritores se las ingenian para mostrarnos su lado humano. Son esos momentos en que casi nos molesta que asi sea, que asi lo muestren. Porque creer que existen solo blancos y negros es siempre mas facil.
Molesta, a todos nos produce una cierta incomodidad cuando el personaje malo, el antiheroe, resulta no ser tan malo despues de todo. Molesta, porque implica que ese "moustruo" no es tan distinto a uno despues de todo.
Ese es el gran problema de aquellos poco comprensivos. Comprender significa ponerse en los zapatos del otro, pero ¿que pasa si esos zapatos calzan? ¿Que pasa si de repente nos encontramos comprendiendo a un "mounstruo"? ¿Que pasa si nos encontramos comprendiendo a un ladron, o a un mentiroso? ¿si de repente nos encontramos comprendiendo a aquel padre al que siempre culpamos por nuestra triste infancia? ¿Que pasa si por un momento alcanzamos a entender a un infiel?
Calzarse los zapatos de un "malo" implica reconocer algo de ese "malo" en uno. Significa que no nos resulta descabellado, que nuestra logica, nuestra razon lo puede procesar y entenderlo.
Es eso lo que nos produce molestia en aquellos personajes grises. Es lo que hay de hybris en todos nosotros, es Ello que se encuentra en lo mas profundo de nuestro ser, lo que nos aterra, a lo que resistimos. Aquello que casi no podemos nombrar.
Pero quizas, una vez que nos animamos a mirar hacia adentro, una vez que nos decidimos a escarbar hacia lo mas profundo, en busca de aquel mounstruo taaan grande, oculto en nosotros, aquel mounstruo al que tanto tememos; podemos llegar a descubrir que ese mounstruo puede simplemente ser un globo muy inflado. Algo mucho mas pequeño de lo que pensabamos, o no tan grave considerando que ese "Nessie" se encuentra en todos nosotros; y que lo que nos hace mejores personas no es negarnos, resistirnos a los grises, sino aceptar los grises propios e intentar que cada dia sean un poquito mas claros. Una persona noble no es aquel que no tiene errores, perfecto, pulcro y limpito de pies a cabeza. Una persona noble es aquel que se cuestiona a si mismo, que puede reconocer y analizar el mounstruo propio, que puede calzarse los zapatos de un "malo" y no asustarse. Un noble es aquel que busca superarse a si mismo, que no juzga, que no tira la "primera piedra", que analiza, reflexiona, se pregunta por el bien y el mal... Esa es la base de ser un "gris clarito", comenzar a cuestionar lo "obvio", no dar por sentado ningun blanco, ningun negro, humano u mountruo. Ver un poquito mas allá de la vista... sincerarse. Porque sincerarse es liberarse. Y ser libre de uno mismo, del "Nessie" propio, es lo mas cercano que hay a la nobleza, a la felicidad...

viernes, 5 de junio de 2009

Tres horas y una ventana

Le voy a hacer honor a algo que escribi cuando tenia 13 añitos. Lo mas ironico es que hoy no se si lo cambiaria demasiado, porque la situacion en si tampoco lo hizo.

Tres horas y una ventana

Sentada y tranquila
comienzo a pensar.
Veo por la ventana
el mundo girar.

Con ansias espero
poder bajar.
El tiempo es largo
cuando con tu pasado te vas a encontrar.

Dos vidas
separadas por tres horas.
Cuando se unen
el tiempo no sobra.

Los campos que veo
ya no tienen que enseñar.
Ninguna experiencia nueva
ha de llegar.

Simplemente,
perdidos en el tiempo,
tres horas y una ventana.

martes, 26 de mayo de 2009

Cantares


















Camino atrás de mis pasos,
siguiendo el perfume de la melancolía.
No voy hacia atrás, no, no es eso.
No siempre, no todo el tiempo.

Camino atrás de mis pasos,
sin saber muy bien a donde.
Camino ya sin pensarlo,
entre los sonidos del viento.

Camino, y tu aroma me embriaga de a ratos.
Intento seguirlo, mas siempre lo pierdo.
Me convenzo y avanzo,
pasito a pasito buscando otros rastros.


Camino, y me pierdo, tropiezo,
corro, salto, vuelo, bailo,
giro, vuelco, me caigo, me levanto.
Y sigo caminando...

Camino atrás de mis pasos,
la arena se derrite a mis pies,
Me agarro de tus brazos,
y ya no siento la piel.

Avanzo, si! camino y avanzo.
El agujero negro de tu cuerpo ya no me traga,
solo revuelve aquel invierno,
mas sigo caminando.

Camino atrás de mis pasos,
Y el corazón me late de nuevo.
Camino al viento, respiro y vuelo.
Camino libre la mayoría del tiempo.


Camino con ganas, camino conciente,
Mis ojos se posan en todo lo que veo,
Todo lo siento, en la piel, en los dedos,
En el aire, en el suelo, en la música, en el peso.

Camino y me camino... me sigo, me persigo,
me olvido, me siento, me pienso,
me cargo, me vuelo, me suelto, me recuerdo,
me lloro, me sonrío, me canto y me vivo... pero camino.

Camino atrás de mis pasos,
Una mochila cargada de historias,
la siento mecerse a mi espalda,
entre batires de sombras.

Camino, y las luces se entibian,
marcas en la piel, tatuaje azul del recuerdo,

luces que me llevan al sol de enero, al sol de invierno.
Y un cazador de sueños llevo colgado al cuello.

Camino y veo tu fuego, que arde a lo lejos.
A mi lado una sonrisa, pasos del silencio.
Me acompañan de a ratos otros sueños.
Sueños que andan como yo, buscando una voz en el cielo.

Camino tu anzuelo, camino tu dedo,
Camino las costas, campos y desiertos.
Camino la nieve, camino tu ensueño,
Camino y los miro, fantasmas del recuerdo.

Camino atrás de mis pasos,
rozando los polvos del cielo,
El hielo se quiebra a mi lado,
Salto al vacío, y no muero.

Caigo al río, caigo al sueño,
cierro los ojos del tiempo.
Camino, y a veces me encuentro.
Manos cálidas derriten el hielo.

Pasos tranquilos, pasos mios.
Sonrisas finales, lágrimas dulces de rocío.
Tus manos me consuelan,
recuerdos de calor consumido.

Camino atrás de mis pasos,
Las estrellas me guían al remanso.
Viajeros las persiguen a mi lado,
Sueñeros del canto, el olvido y el apasionante deseo.

Camino atrás de mis pasos,
llevando esperanza en el brillo de lo que veo.
Camino sobre la cornisa,
jugando con el filo del tiempo.

lunes, 11 de mayo de 2009

Sueño de una noche de otoño















Del sueño traigo un sueño, de tus ojos azul profundo, de tu sonrisa de cielo, y cabellos al viento.
Del sueño te sueño en otro tiempo, de traje negro, mirada tierna, brillando a mi lado, bailando lento, solos en el universo de un gran salón, lleno de flores, amigos y deseos.
Te sueño en viajes, con mochila al hombro, corriendo conmigo, disfrutando del vuelo.
Te sueño feliz, jugando con mi cabello, mirando mi boca y sonriendo de nuevo, tirado en la cama, amando lo nuestro, en una hermosa mañana de enero.
Del sueño te traigo, te abrazo y te beso, con dulzura, con pasión, me hundo en tu cuello y te siento todo, entero, tus aromas, tus sonidos, tus latidos, y allí muero. Tus manos me despiertan, tibias en mi cuerpo, caricias de nirvana, somos uno en dos cuerpos.
Sueño tu mano en mi mano, sueño tus pasos saltando a mi lado, sueño un abrazo y los pies elevados, te sueño cantando y riendo, mirando asombrado. Si, te sueño aún asombrado!
Te sueño en asados de domingo, niños jugando al sol de invierno, corres y das vueltas con ellos, los alzas, me miras y sonríes de nuevo. Complice te la devuelvo... que suerte tengo!
Te sueño en los detalles, en lo maravilloso del tiempo; durmiendo a mi lado, leyendo algun verso, conversaciones de paso al desayunadero, películas de viernes en un sillon lleno, beso de buenas noches, madrugadas de fuego.
Si, sueño una vida contigo, una vida con tu mirada, con tus manos, con tus besos; sueño una vida con mi compañero.

Te sueño soñandome...

martes, 14 de abril de 2009

Tarea fina

Si me preguntas que fue,
te diría tu sonrisa...
o quizás alguna brisa que se llevo el tiempo.

Recuerdo los aires, la gente, los bailes.
Regalo del karma, chiste de Dios.

Y en un descuido de Helen,
aprovechaste el momento.
Nos robaste la mirada, el deseo, y algo mas...

Aún no se bien que cargabas esa noche,
un puñado de tu vida encantaba la velada,

Toneladas de besos, esperando algo real,
se mezclaban con mi acompañada soledad.

Tus manos me envolvían, tu mirada me tocaba...
Y tu perfume a libertad me inundaba de aire nuevo.

Mil canciones bailamos, mil veces nos amamos,
Y alguna que otra vez nos ahogamos en sal.

Tardes amarillas, sábados blancos,
mañanas de rosario, tu boca en mi calendario.

Jugando con el frió de las noches, como niños enamorados.
Nos sorprendió la primavera, girando y girando.

Te busque todo un verano entre mates y comidas
Esperando caricias que nunca volverían.

Relación amorosa con el contestador de un celular,
y sin embargo nunca deje de llamar...

●๋•

Empezado en septiembre del 2008.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Todo un mar...


Te pienso una vez mas, esperando encontrarte en los mares del recuerdo. No se si alguna vez estuviste realmente alli, pero el recuerdo es bien real.
Y en el recoveco de tu cuarto caigo de vez en cuando, y miro al verde gastado, y huelo tus aires de musico cansado, de niño asustado. Un toque de madera, una pisca de libertad, tus cabellos despeinados, y tu cuello con su sabor particular. Citricos gauchescos, fotos de otros tiempos, el aire de tu ventana tiene un vuelo especial.
Vuelvo al verde, y a tus ojos. Esos que me miran, y no puedo descifrar. Ojos cobardes que no me pueden encontrar, tu mirada triste queriendo escapar, queriendo decir mas de lo que tu boca jamas podra. Tu mirada que me escapa no queriendo escapar.

Vuelvo a tu boca, esa que algun dia me robo las ganas de besar a nadie mas. Esa que de a ratos se le escapa una verdad, y me canta las canciones que siempre quise escuchar. Me delinia una sonrisa, me derrama la pasion, me borra las memorias de todo dolor.
Tu boca y su sonrisa llena de color, pinta azules en el cielo, amarillos al ocaso, y sonroja mis mejillas de tanto en tanto.
Sonrisa aniñada, que esconde tanto andar. Y tus labios dulces, a los que no me puedo negar.

Los sonidos de tu cuarto no los puedo olvidar, melodias que me llevan a nunca jamas, melodias que me hablan de no volver a llorar. Bombos y guitarras, voces de la libertad, que en la tempranera de rosario me llenaban de vitalidad. Luz de amanecer en la ciudad, con la nostalgia de la noche, y el despertar de un sueño real, para ser arrancados de nuestro mundo ideal, a la rutina de la vida en soledad.

El sueño duro poco... Llevo tiempo de solo despertar... Sin embargo de vez en cuando, caigo de nuevo a nuestro mar, que nunca deja de azotar. El relog se derrite una vez mas. Tus palabras se humedecen en mi andar, los recuerdos vuelven a pesar...


Te recuerdo una vez mas.

miércoles, 18 de marzo de 2009

Alada















Volver a casa...
Paso a paso, golpe a golpe...
Un pie delante del otro...

Que tal si los dejo libres?
Volverían de todos modos?

O tal vez, se lanzarían al río a dejarse fluir?
Se llenarían de nieve a mas no poder?

Caminos cansados de tanto andar,
aire puro y volar...
Con el viento, al sol de invierno, volar...
Saltar y bailar de libertad,
correr y correr
hasta ya no sentir peso ni levedad.

Las emociones en el aire se quedaran.
Todo pasa y todo queda,
dijo un sabio alguna vez.
Paradoja del querer olvidar,
del querer recordar.

El tiempo corre con la vida,
corre de tren en tren,
se vuela con el aire,
en sus perfumes de ciudad.

A donde vuelvo? A donde voy?
A quien extraño? A quien no?

Algo cambio, aun no se muy bien que.
Perdida en el mundo me encontre,
y me volvi a perder...

viernes, 6 de febrero de 2009

Sobre la cornisa

Sometimes you are just an idiot...

Sometimes, I just want to trouw you up the window...

"Forever maybe"... I don't think so.

I want love, I want to love...

Take off that piece of metal, and then we`ll talk.

I'm sorry sweety, I don't think you would

I`m sorry sweethart, I'm not the only one who lose...

Sobre la cornisa, esperando el milagro...

08/08

martes, 3 de febrero de 2009

My tragic flaw

it's from an essay that Ephram wrote about his 'tragic flaw', Everwood

"Staying exactly the same for as long as possible, standing perfectly still. It feels better somehow. And if you are suffering, at least the pain is familiar. Because if you took that leap of faith, went outside the box, did something unexpected...who knows what other pain might be waiting out there? Chances are it could be even worse. So you maintain the status quo, choose the road already traveled, and it doesn't seem that bad, not as far as flaws go. You're not a drug addict, you're not killing anyone...except maybe yourself a little. When we finally do change, I don't think it happens like an earthquake or an explosion, where all of a sudden we're like this different person. I think it's smaller than that. The kind of thing most people wouldn't even notice unless they looked really, really close. Which, thank God, they never do. But you notice it. Inside you, that change feels like a world of difference, and you hope that it is... That this is the person you get to be forever. That you'll never have to change again."